Según estudios realizados uno de cada seis personas sufren de dolores de cabeza derivados del estrés. Esto llevó a que en el 2001 más de 9 millones de personas en los Estados Unidos visitaran al médico por este problema.
Y todo se deriva al estrés de los estilos de vida que hoy en día suceden. Si este es tu problema a continuación te contamos un poco más sobre el estrés y lo perjudicial que puede ser para tu salud.
Sin dudas que el impacto de la tensión diaria afecta la salud física, mental y emocional. Sin ir más lejos, la tensión llega primero a los músculos haciendo que aparezcan las famosas contracturas musculares. Y a su vez hace que el corazón trabaje más duro para llevar la sangre necesaria a través del cuerpo.
Y cuando sientes que tienes mucha contractura en los hombros, espalda y cuello, significa que tus músculos están absorbiendo la tensión y a su vez el flujo de sangre que está yendo a tu cerebro se ve disminuido. Y con todo esto es normal tener cuadros de conflictos para dormir, preocupación desmedida, ansiedad prolongada entre otros factos psíquicos. Y uno de los factores más presentes el es dolor de cabeza.
Los dolores de cabeza por el estrés se producen en dos formas: episódica y crónica. La diferencia es la frecuencia en la que aparecen. Las cefaleas episódicas se producen en un estimado de 15 días al mes, mientras que los episodios crónicos se producen más de 15 días al mes.
En si no hay una causa definida de las cefaleas tensiónales, pero si se sabe que es producida por el estrés. Vale mencionar que el estrés se puede producir por la mala posición, esto ocurre en las personas que trabajan frente al ordenador por muchas horas. Otras causas del estrés pueden ser el esfuerzo excesivo, la fatiga, ansiedad y otros problemas emocionales.
Incluso hay quienes pueden estresarse en los cambios de rutina, problemas en el medio ambiente donde yacen o conflictos internos de la persona.
Tratamiento
Los tratamientos dependerán de la causa del estrés. Por eso es bueno identificar las situaciones o cosas que te producen estrés. En el caso de estrés cotidiano (mala posturas, trabajo, etc.) tomar analgésicos musculares puede ser una buena opción para mitigar el problema. En el caso de estrés crónico es bueno optar por meditación, yoga o salir a hacer ejercicio. De esta forma estarás librando dopamina y te ayudará a combatir el estrés diario.
Sin dudas que el estilo de vida de cada persona juega un papel muy importante en la salud física y mental del individuo. Pero si a todo le sumas una alimentación saludable, descansas lo suficiente y haces ejercicio, verás como el estrés lo comienzas a manejar de otra forma. También es bueno no preocuparse tanto por cosas que no puedes solucionar, sino que enfocarte en cosas positivas y que te hagan feliz.
Foto: nuevotiempo.org
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